Aprovecha el calor que produce la lámpara de filamento (Ya NO en producción masiva desde el año 2014) encendida para calentar el recipiente donde se colocan las esencias y el agua. Si bien el método es sencillo, nos encontramos en presencia de un artefacto con serios inconvenientes de seguridad ya que si se derrama el líquido sobre la lámpara encendida, esta estalla y el líquido puede producir un cortocircuito en el portalámparas. Elevado consumo eléctrico  (Utiliza lámparas de 25 a 40 W) y necesita que SIEMPRE exista liquido en su base, caso contrario la elevada temperatura rompe el recipiente (habitualmente de bizcocho cerámico).